He conseguido calmar el viento, parar el tiempo.
He quedado contigo a tomar un café, después de tanto tiempo, después de todo lo sufrido, después de tantas cosas pasadas y tantos días cercanos,pero al final todo se deshizo....
Tú te sientas enfrente mio, estás diferente, tienes otro aire más sereno.
Yo me encuentro más calmada, ya no hay diferencias entre nosotros, equívocos, situaciones que nos hagan sufrir.
Se hacen unos minutos de silencio...parece que lo requiere la situación. Es algo inevitable.
Pero pasan los diez primeros minutos, y todo vuelve a la normalidad, nos contamos chistes, bromas, reimos, somos más nosotros que nunca, ya no hay tensión, ni nervios, ni pensamientos de desconfianza, ni dolor.....
Es una tarde preciosa, ha entrado la luz en la cafetería.
Dicha cafetería no tiene nada especial, es un sitio de lo más normal. Miro alrededor y en cada mesa puedo ver diferentes tipos de personas, pero todas tienen el mismo fin: reunirse, dialogar, estar un ratito a gusto.
Me coges por los brazos y los acaricias de una manera muy cariñosa, haciéndote sentir cercano a mí, dándome tu cariño.
Yo me siento feliz.
Ahora tus ojos tienen un brillo especial, parecen más claros a la luz. No me acordaba de cómo me hacían sentir.
Miro tus manos, y no puedo evitar recordar que un día yo las acaricié. Se unieron a las mías. Pero es un recuerdo vano, hemos dejado pasar tantas cosas que ya no me duele. Me reconforta pensar que fue todo precioso, cada instante que estuvimos juntos, lo bien que me sentía a tu lado. No se puede explicar algo que sólo se vive en un momento especial de la vida. Porque entra como un volcán de lava suave, desplegando calor por todo tu interior, y haciéndote sentir viva.
Recuerdo eso....
Y ahora te miro con un poco de añoranza o tal vez melancolía.
No me arrepiento de haber sentido lo que he sentido, de haberte conocido, de haberte amado, de sentir la sensación de estar viva y plena.
Y ahora te vuelvo a mirar, estoy completa, te veo diferente, pero no distante. Sigue habiendo calidez, un gran cariño, y muchos deseos de seguir compartiendo cosas juntos, de continuar la vida cada uno por su sendero pero con el apoyo incondicional del otro.
Y te vuelvo a mirar y puedo decir que ahora me siento en paz.
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4 comentarios:
Preciosa.
Me he sentido muy identificada con ella. Sostengo la teoría de que se puede ser amigo de un ex. De un ex o de alguien a quien hayas querido mucho sin necesidad de haber llegado a nada al final. Y la sostengo porque sé que se puede llevar a cabo. Lo he hecho en más de una ocasión.
Y es eso. Justo como lo describes. Que quieras verle o tomarte un café, no implica nada más allá de estar con él un rato. No porque te vayas a echar a su yugular o le vayas a suplicar que vuelva contigo jajajaja. Que, sinceramente, creo que muchos temen eso y por eso se distancian jajajajaja (creídos... xD). Pero no sé... cuando las cosas por lo que sea se tuercen o no cuajan, creo que somos lo suficientemente maduros ya como para saber diferenciar y saber rescatar lo que merece la pena salvar. Y, en ocasiones, vale la pena conservar la amistad (sí, en ocasiones, porque otros no se merecen ni qué jajajaja). Y tú has sabido definir muy bien esa situación.
Aunque, en mi caso particular, siempre evito el contacto físico con una ex-pareja. Es una pena porque con los amigos o incluso con compañeros de trabajo y tal pues de broma de vez en cuando sí que tiras un pellizco, o le clavas el dedo para hacer cosquillas, en fin... pero ya con un ex hay ahí una especie de "memoria" que en fin... mejor evitarlas que después los tíos también son mu raros y pueden interpretar que estás dando pie a algo o que aún "mueres por sus huesos" jajajaja :P
Un besito ¿Te he dicho ya que me ha gustado? xD
Muchas gracias, pues lo que he querido expresar es cuando amas a alguien y todo termina, y puede que aunque no haya amor, si puede haber una gran amistad, o incluso te puedes llevar mejor con él como amigo que como pareja...pero cada caso es diferente. Me ha gustado tu comentario, me hace pensar, creo que eres una persona realista, aunque romántica, pero tienes los pies en la tierra. Muchas gracias.
Vaya, es un post precioso.
Y la verdad es que sí que se puede tener una amistad con una ex pareja.
Si te has querido bien, no hay motivo para no conservar parte de ese cariño después.
Suelen ser relaciones muy especiales de cariño en las que uno sinceramente se alegra de la felicidad del otro, sufre por su infelicidad, y existe un apoyo mutuo en cualquier caso.
Yo lo he vivido, lo vivo de hecho.
Incluso ser amigo de su nueva pareja, felicitarle por su ma/paternidad...
Darse un abrazo con esa persona que ha sido tanto para ti y viceversa, es algo muy bonito, como abrazar a un familiar muy querido. Siempre desde desde el respeto y conociendose tan bien que no caben los malos entendidos.
Una vez me miraron super raro, y practicamente me insultaron por decir esto...mujeres casadas, con hijos, que sostenían que no podrían ser jamás amigas de sus ex-maridos...
Está claro que según el caso puede doler un poco...siempre queda un pellizquito al ver a esa persona frente a ti. Pero renunciar a tener a esa persona en tu vida, es muy triste.
Bueno perdón que me enrollo :S
Volviendo a la entrada, en serio , preciosa, lo has contado muy bien, como si vinieras de esa cafetería ahora mismo.
Besitoss
Pues haces muy bien, eso demuestra madurez y personalidad, y esas chicas casadas que te miran raro, que cerraditas de mente, pero bueno, no todo el mundo evoluciona igual parece mentira a las alturas que estamos, te puedo garantizar que los paleolíticos del auriñaciense....jaajajajaja eran más evolucionaos...jaajjaa..esto es broma, pero lo otro noooo!!!!..
Yo pienso que si has querido a un hombre pero las circunstancias no os permiten estar juntos, por tener diferentes personalidades, en fin, por lo que sea.¿Por qué no puedes ser su amiga, y alegrarte por él, en vez de ser su enemiga y crear sentimientos que al fin y al cabo te hacen a tí más daño?.
Es mi forma de verlo.
Bueno ... pues gracias por tu comentario, creo que tú y yo tenemos formas de ver la vida muy parecidas.
Muchos besos
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