viernes, 30 de septiembre de 2016

Mis viajes

Estuve en Madrid viendo una exposición preciosa de "Caravaggio a Bernini" en el Palacio Real, muy interesante, y ya de paseito por Madrid, que por cierto buen tiempo, mucho bullicio, riquísimos bocatas de Jamón por zona de Ópera, y ya luego fuí de paseo al Thyssen, os dejo fotos:

Exposición de "Caravaggio a Bernini"













Palacio Real visita.
 


Museo Thyssen













viernes, 23 de septiembre de 2016

Cuando el amor es un dilema. Introducción.

Me encontraba cansada, siempre después de los vuelos me entra una especie de sueño que me deja atontada.

 -Me acababan de destinar a Roma,  en mi empresa se produjo una expansión para abrir unas oficinas de Turismo. Mi trabajo sería de guía y yo me encontraría haciendo "tour turísticos". 
 Aquel sueño creo que era fruto de una semana sin dormir bien por sensaciones como: la emoción, los nervios, una mezcla de incertidumbre en mi pensamiento.
 En parte tenía miedo, porque iba sóla y sentía la inseguridad esa.. de un país extranjero y no conocer, en fin, que me producía una cierta tristeza.
 Así que por un lado tenía la energía y pasión de querer comenzar con mi soñado trabajo y por otro: pena, inseguridad, un tanto de miedo que me hacía perder el sueño por la noche. 
Aún así las ganas habían superado a la desconfianza, y me encontré pisando Ostia por primera vez. Cogí un taxi y me dirigí a un piso compartido (que al menos para mi consuelo, sabía que había un chico español),  y pensé para mí lo típico que se suele pensar, pues que ojalá fuera simpático y me ayudara en manejarme por allí,  y las otras dos chicas era de Milán con trabajos en Roma.
 Me pareció cuando lo visité por la agencia que era un piso agradable, luminoso, pequeño, y algo céntrico, nada menos que cerca de La Piazza Barberini y cerca de La Fontana, un lujo.. mayormente para ahogar mis penas en bocatas de porqueta y cerveza si la cosa anda mal.
 Y ya os he puesto en antecedentes, y como estoy cansada y con hambre primero iré a comer algo porque necesito relajarme antes de enfrentarme a un montón de cosas nuevas, que me aturullan la mente; me refiero pues: a un piso nuevo, gente que no conozco, el primer día de trabajo, ciudad que tampoco me desenvuelvo..a ese tipo de cosas me refiero.



lunes, 19 de septiembre de 2016

Aquel fuego

El fuego iluminaba la ciudad dando calor  al sentido de la vida. Todo quedaba como un bello claroscuro entre luces que penetraban en las siluetas dejando las sombras como un escenario aparte.

El camino del destello hizo que te mirara como algo que no esperaba, algo tan sublime que mis labios temblaron.  En ese momento sin saber, me hiciste creer, me hiciste esperanzarme con el destino.

Un bello destino contigo, con tus manos, con tus dedos entre los míos al acariciarnos con cariño. 
El viento manejaba a su antojo nuestras túnicas transparentes y bellas. También ondulaba los cabellos en una bella caricia, y así cerca de la colina, parecíamos eternos, y frágiles a la vez ; ante aquel fuego que nos calentaba y nos obligaba a sentir lo más bello y tierno que jamás hubieramos deseado.

En esa pequeña colina y al fondo una milenaria y pequeña acogedora ciudad, con gentes de acento sencillo con mucha tranquilidad, encontré tus manos, encontré las mías....y el abrazo del beso al fin entregado con el fugaz amor del fuego, más bien con ardor y  de color naranja como sus chispas, amarillo como la ilusión del sol encendido.

Bello y amable, querido amante, allí me encontré con tu corazón. 



martes, 13 de septiembre de 2016

La fuente

Caminos que deshacen el tiempo en noches amargas y desechas, en lágrimas ajenas a tus palabras. 

Pozos y fuentes ahuyentan tus miedos como de miseria en el corazón arranca lo mísero.

Piedras mojadas sobre tus cálidas posaderas, enciendes el anhelo de ver pasar el tiempo, en aquella poza que mata el dolor no vivo, el canto no desgranado, el calor no sudado.


Y todo pasa.....

Y nada queda, sólo tu susurro desvalido, amasado por tus garras de bravo coraje que me deja petrificada tal piedra me aposento, sin saber de ti tu nombre, sin saber el daño causado, grito, lloro y no finjo nada más que ...el tiempo ahogado en la fuente, las lágrimas desrramadas sin pasión, el camino que no acaba en polvo. 

Y tu silencio marcado por una torrencial hoguera de pecado e ira.

No volveré a la fuente, no volveré a llorar en mi destierro, me ahogaré en mi pena y no volveré a saber de aquellas aguas..perdidas en el tiempo.


De viaje por Cáceres, Guadalupe, Plasencia, Mérida y Trujilllo




















miércoles, 7 de septiembre de 2016

Entre muros

Paseando entre muros, un ancho y oscuro pasadizo tan sólo iluminado por un tenue vano,  mostraba la  piedra caliza y me indicaba los pasos hasta un foso inundado de calaveras y huesos. Un lugar  donde me hablaba de un tiempo lejano, me inspiraba.... guerra, muerte y traiciones.

Parecía oler todavía a siglos pasados, huesos partidos todavía sin investigar, sin saber el tiempo que llevaban allí y de quien eran (o al menos eso me gustaba pensar,  que al pasear  por ahí, el olor  a misterio me emocionaba de cierta manera que hacía que la respiración aumentara ¿qué pasaría?).

Mi amigo arqueólogo me había abierto la gruta, pero no me contó nada puesto que escribe un libro y no quiere desvelar. En mi visita,  me dejó intuir y documentarme para que yo adivinara que había ocurrido en áquel oscuro lugar. Hacía tan sólo unos minutos leía y ya había investigado sobre una guerra italiana pasada,  y unos ataques. Así descubría que habían sido luchas de poder por un territorio y por tierras, me latía el corazón fuerte al pensar que eran tan cruentos: 

(-¡¡qué, por Dios Santo, todo  me pareció muy abraviso!!- y dejé de leer, para poder centrarme en lo que estaba viviendo en esos momentos).

Me centré en mi pensamiento, pues aquel paseo hizo olvidar mis lecturas anteriores y recorrerme en un silencio que producía paz y algo de miedo. Pensé que si no volvía mi amigo quizás no pudiera salir y eso me aterrorizó, así que corrí rápido hacia la puerta de entrada que había cerrado, (pues era una verja sólo para uso de personal cualificadoy tras ella,  escondía aquellos pasadizos privados a la gente que no fueran de la Universidad o de Investigación). En esos momentos deseé no haber entrado pero ya era tarde, y pensé en  si Gabi se retrasara estaría mal  porque el frío empezaba a calar y se me estaba secando la boca de susto. Pero lo que más me sirvió fue sentirme como aquellas personas y pensar lo fríos que somos los humanos al enterrar tanta genta gente allí sin sentir culpabilidad.

Ahora ese sitio hablaba de crueldad y temor, pero imagino que entre guerras el olor a sudor,  sangre y la barbarie, quise entender que quizás no pensaban y actuaban acérrimos a ideales y egoismo en caliente como algo que no era lo que es en realidad -Muerte a destajo sin parar-.  Imagino que para ellos más bien un deber u obligación, puede que un derecho de honor a su pueblo, a saber..., lo cual  a su entender no parecía tan miserable y terrible.

Aunque, no hay disculpa a la guerra y el dolor,  y no logro entender, ni llegaré nunca a comprender por más que estudie Historia, esa gana de  poseer, haga que nos matemos poco a poco entre nosotros, - la humanidad rota y acabada por miserables-.

Mi amigo Gabi apareció entre ese cruce de emociones, sensaciones, pensamientos que me fluían rápido por mi interior,  y me abrió la puerta. Él parecía entender mi reacción, y  me sonrió al ver  mi expresión abierta a esa  experiencia que había sido al menos intrigante para mí.



 

Estas Navidades

  Todo aparece y desaparece en un segundo, es el tiempo el que trascurre sin pensar, o sin parar.   Y en cada  atardecer estás ahí, parada o...