jueves, 8 de julio de 2010

Un chico en prácticas

Cuéntame....cómo la tarde que brilla con su espléndido sol.-¿Has pasado por aquí?.- Y sí, es por casualidad. Te acercas, me miras con una sonrisa, y esperas a que hable. A quién sea yo la que diriga. Pero tú no sabes.. qué soy yo la que te doy paso, para que aprendas, para que tú también me presentes tu creatividad. Sabes, que yo voy más rápida, llevo tiempo trabajando, pero tú tienes buenos conocimientos, muy útiles para mí, y entonces, como si los minutos pasaran rápidos, tomamos mutuamente el mando.

A mitad de la hora, no nos hemos dado cuenta, no nos hemos presentado. Dices tu nombre, bajito y con una sonrisa, es posible que estés buscando mi aprobación. ¡Quién sabe..lo que piensas!. Pero recuerdo mi primer trabajo, y en parte me recuerdas a mí.

Me acerco lentamente a tí, observándote y te veo disfrutar, te veo trabajar con delicadeza, tus palabras, tu sonrisa, hace que una tarde cualquiera, de un día cualquiera, sea la caricia de una nueva sensación. Lo que en solitario eran solo mis palabras las que hacía eco, pues contigo, responden, se contonean en vibraciones de sonido, y vuelven a mi los sonidos, imaginando nuevas perspectivas y formas de trabajar, que son innovadoras y agradables.

Gracias Josema, un placer trabajar contigo.







;)

No hay comentarios:

Estas Navidades

  Todo aparece y desaparece en un segundo, es el tiempo el que trascurre sin pensar, o sin parar.   Y en cada  atardecer estás ahí, parada o...