Caminaba asustada sin rumbo, esperando un consuelo, pero la gente no se percibía, pasaban por su lado y no miraban.
Corría, y no sabía donde ir, porque el tiempo y el camino le parecía eterno.
Con miedo a volver a verle, atrapada sin un óculo donde poder iluminar su desesperación.
Y allí entre calores, y angustia, no paraba de andar, correr, perder y jugar, a lo que no sabía cómo ganar.
Ese miedo le atrapaba sin dejarla apenas respirar. Y aquellas personas diambulaban como si nada, y para ella el mundo se movía girando a gran velocidad.
¿Cómo es posible que nadie me vea?. Será oculto el miedo que siento.
O quizás no quieren ver...
Ayuda, te amo pero no podría volver a enfrentarme a tí
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