Ahí, siempre te recordaré mirando al horizonte.
Aquel mar, que no te vió crecer, pero hizo de tí tu destino.
En aquel hermoso puerto de mar, donde encontraste tu amor eterno.
Siempre con ella, siempre con nosotros, desde cualquier punto del mundo.
Viajero solitario, ese era tu carácter, sólido, fuerte, tierno y comprensivo a la vez.
Tus ojos lo vieron todo, el mundo se hizo ante tí, y en tu recuerdo habitábamos nosotros.
Recuerdo tus cuentos de vampiros cuando éramos pequeños, tus dibujos de drácula en nuestros libros de infancia. Tus bromas, y tus riñas.
Y desde este lugar del mar, al cual quisiste tanto, y soñaste tanto, en esa gran muralla, miraré hoy el horizonte a través de tus ojos de mundo.
Te quiero, gracias por darme la vida.
Aquel mar, que no te vió crecer, pero hizo de tí tu destino.
En aquel hermoso puerto de mar, donde encontraste tu amor eterno.
Siempre con ella, siempre con nosotros, desde cualquier punto del mundo.
Viajero solitario, ese era tu carácter, sólido, fuerte, tierno y comprensivo a la vez.
Tus ojos lo vieron todo, el mundo se hizo ante tí, y en tu recuerdo habitábamos nosotros.
Recuerdo tus cuentos de vampiros cuando éramos pequeños, tus dibujos de drácula en nuestros libros de infancia. Tus bromas, y tus riñas.
Y desde este lugar del mar, al cual quisiste tanto, y soñaste tanto, en esa gran muralla, miraré hoy el horizonte a través de tus ojos de mundo.
Te quiero, gracias por darme la vida.
2 comentarios:
Ains, qué bonito.
Tú sí que honras el día del Padre. Qué importantes son los padres (me refiero a padre y madre) para uno. Nos marcan mucho, incluso más de lo que creemos.
Hay que quererles siempre.
Besitos ;)
Gracias, me apetecía, :) y es verdad que marcan :)
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